miércoles, 26 de mayo de 2010

RÉQUIEM POR EUROPA

El próximo fin de semana se celebra Eurovisión. Un acontecimiento que casi nunca sigo, por cierto, pero que después de esta crisis igual es lo único que nos queda de nuestra soñada Europa...
Esa Europa vieja, hegemónica, ilustrada, industrializada, capitalista, colonialista, orgullosa, demócrata...Esa Europa del bienestar... Esa que ha dominado el mundo durante el tiempo suficiente como para granjearse múltiples enemigos.
Hoy está en crisis. Está perdida y parece que sólo se deja guiar por el Fondo Monetario Internaconal y sus consejos. Consejos que sólo velan por el mantenimiento del sistema capitalista a cualquier precio. Bienvenidos a la dictadura de la economía.
Las pautas son claras: todos tenemos que reducir el déficit y todos los países han de actuar igual...porque "hay que dar confianza a los mercados"...
Seamos serios y llamemos a las cosas por su nombre. Hay que dar confianza a los especuladores. Hay que conseguir que unas supuestas agencias de calificación nos den buena puntuación, esas mismas que dos días antes de que la burbuja de las hipotecas "subprime", con sus "activos tóxicos", explotara, les habían dado la máxima nota. Lo importante es que bancos y tiburones duerman tranquilos y tengan asegurado sus dineros, sus acciones...
Qué narices importa si mientras tanto un funcionario no llega a fin de mes, o un cabeza de familia se queda en paro. A quien le interesa si una señora de 65 años soltera no tiene ni para papel higiénico para limpiar toda la mierda que le ha salpicado sin comerlo ni beberlo, porque la pensión se le ha quedado en nada. Qué más da si para conseguir esa reducción del déficit vamos perdiendo poco a poco todos y cada uno de nuestros derechos sociales; cuando quizá eran la única cosa de la que podía enorgullecerse Europa.
Esta crisis nos ha dado en lo más profundo. Y sin recurrir a mis dotes de pitonisa, simplemente observando, veo que nunca se va a volver a la situación anterior...
El mundo cambió profundamente tras el crack del 29... Esto es algo parecido pero con una diferencia importante: La Europa que conocíamos no volverá a dominar el mundo.
Europa no asume que en el sistema que inventó, y que tan bien le ha funcionado durante tanto tiempo, tiene ya muy poco que decir. El mundo se ha cansado de su actitud paternalista, neocolonialista, en donde intentaba imponer su modelo, aquellos valores que arrancan en la Ilustración con los "derechos inalienables del hombre". Esto puede sonar muy bonito, pero en su intento de exportar estos ideales a través de un sistema político-económico arquetípico: la democracia capitalista; olvidó que no todos los países del mundo vivieron ni les afectó la Revolución Francesa, y quizá por eso Europa sólo consiguió exportar sus sistema económico, no su ideal de equidad social...
Un sistema económico, hoy ya globalizado, en el que todos compiten duro. Un sistema donde lo único universal, son las ganas de enriquecerse, sin importar para nada si eso es a costa de que la mayoría de las personas vivan sin derechos, sin protección social, sin calidad de vida...
Europa debería darse cuenta de que no tiene nada que hacer en SU sistema, porque el resto de países viene pisando fuerte, en parte porque no siguen SUS reglas. La teoría dice que hay que crecer en PIB, pero también en BIENESTAR. A las nuevas potencias parece que lo segundo se les olvida... Y hoy con lo que estamos viendo diría que también a Europa... Mantengamos nuestro crecimiento económico aunque sea diezmando nuestros derechos que tantó costó conseguir.
Mi querida Europa, China dominará el mundo... Sería mejor asumirlo cuanto antes y ver qué queremos: seguir compitiendo en una batalla perdida de antemano, viendo en esa lucha cómo se van perdiendo las pensiones, la seguridad social, la estabilidad laboral, la jornada laboral de 40 horas semanales, la educación pública y gratuita...
O buscar alternativas a este régimen injusto, cruel, paradójico y en buena medida ficticio donde todos dependemos de una teórica y supuesta "confianza de los mercados" en nuestra capacidad para pagar y/o endeudarnos, no en nuestra verdadera capacidad real...

Europa ya ha tomado su decisión plegándose a las exigencias del FMI, y confiando en "la Europa del conocimiento" que quiere impulsar el plan Bolonia... Eso sí, confiando un poco ingenuamente en que "Europa" no se romperá antes. Alemania ya ha amenazado con salirse del Euro, y a punto se estuvo de echar a Grecia de nuestra "querida" Unión. Y es que son pocos los europeos que se sienten EUROPEOS o se identifican con esa sosa bandera azul que amalgama a muchos que durante siglos fueron enemigos acérrimos. El nacionalismo "europeo" está en pañales. A Europa le pierde el orgullo... Y su embrollado aparato burocrático, con todavía escaso poder ejecutivo real, se convierte hoy, en una época difícil como ésta, en un estorbo a la hora de tomar decisiones rápidas, efectivas y valientes. Poner de acuerdo a tantos países, a tantos políticos que representan culturas y visiones muy diferentes, es harto difícil... La consecuencia probable será que antes o después tire cada uno por su lado, o que por el contrario se refuerce el poder ejecutivo y las competencias de la Comisión Europea.
En mi humilde opinión, tirar cada uno por su lado con el panorama que se nos presenta sería de una torpeza supina. Sin embargo reforzar el poder de la Comisión, cuando lo único que hacen es doblegarse a los deseos del FMI, sin plantearse alternativas más allá de recortar gastos y convertir el conocimiento en una simple mercancía más, susceptible de comercializarse, pues tampoco lo veo una buena solución.

Así que volvemos a lo que ya he dicho muchas veces: no hay una alternativa político-económica clara, factible, comprensible y capaz de aglutinar a las masas... Nadie sabe cómo cambiar de sistema, aunque cada vez seamos más los que nos hartamos del que tenemos. Pero sin una alternativa, sin una opción de cambio, cualquier movilización queda reducida a un triste pataleo que no va más allá de un par de titulares en prensa y una pequeña bronca bochornosa en el congreso.
Partiendo de la base de que no existe el sistema perfecto, deberíamos preguntarnos seriamente ¿qué está mal? ¿qué hay que cambiar? ¿cómo puede cambiarse? ¿qué consecuencias podrían tener dichos cambios?
Son preguntas muy complejas, en las que cada uno podría dar una respuesta distinta, pero yo creo que vale la pena hacérselas, y no desde el punto de vista exclusivamente ideal, sino buscar respuestas viables, que partan de bases reales. La anarquía, el marxismo, el socialismo o el liberalismo político, han dejado un importante sedimento (al menos en Europa y lo que se considera Occidente), pero no nos engañemos, nuestro mundo poco tiene ya que ver con el de Marx, Bakunin, Fourier por no hablar del de Locke o Rousseau. Anclarse a los viejos ideales es simplemente tan utópico que resulta inútil. Y sin embargo, ninguna idea política poderosa ha surgido desde entonces... ¿Es el precio del excesivo cientifismo? ¿de la decadencia de las letras? No lo sé. Lo que está claro es que cada vez pensamos menos. Y lo peor es que Europa cree que eso le interesa. Quiere convertir a aquellos estudiantes que consigan pagarse una plaza en alguna universidad "de excelencia" en simples marionetas que contribuyan a producir "conocimientos" (o lo que hoy se entiende con ese término: patentes y productos). Quiere trabajadores que, como máquinas, dediquen horas y horas de su vida a ello, no vaya a ser que en algún rato libre les dé por pensar en que serían más felices pasando más tiempo con la familia o los seres queridos, saliendo al campo a respirar, o si para pagar su pensiónno dependiera de su sueldo miserable que apenas le alcanza para sufragar los estudios y la sanidad del único hijo que se pudo permitir tener a los 40 años.
Mantener esto creo simplemente que es ir contra-natura. Luchar por sostenerlo pagando con nuestros derechos y bienestar, sin siquiera cuestionarse el modelo, sin que se hayan intentado alternativas... Me niego a aceptarlo.

Así que pensemos, por lo que más quieran, pensemos en lo que es y queremos de Europa más allá de Eurovisión. Más allá de lo prudente, lo conveniente o lo mediático. Sin ideas no hay solución, no hay revolución, no hay renovación. Sin ideas podemos despedirnos de la "Europa" que conocimos de derechos laborales y garantías sociales, adiós a la Europa ilustrada, a la Europa rebelde del 68, a la Europa que lideró el mundo manchándose de sangre...

Yo intentaré dar alguna de mis torpes ideas, respuestas, reflexiones en próximas entradas. Mientras tanto, ¡que suene la música! Aunque hoy el "Europe's living a celebration" suene a Requiem...

miércoles, 5 de mayo de 2010

Muerte de un hada

Solía escribir en un cuaderno precioso con un boli en forma de hada.
El hada que escribía ha muerto. Murió del desuso. Del abandono en un cajón sin que nadie se acordara de ella.
Mientras lo que deseamos está siempre en nuestros pensamientos, lo que poseemos se olvida fácilmente...
Hoy no es momento de escribir. Hoy es momento de soñar. De fluir con mi hada allá donde se encuentre...
Se cansó de custodiar mi cuaderno de tristeza
Le arrollaron mis lágrimas y navegó al alegre mar...

Entre cascadas y simas,
cavernas, ramblas, meandros,
rías, deltas y marismas,
la brisa le está acunando.

Un día iré a buscarte.
Cambiaré cierzo por aire,
las estaciones por puertos,
Monegros por oleaje.

Iré persiguiendo un sueño,
ése en el que te escapaste.
Dime, mi hada, dime:
¿Dónde puedo ir a encontrarte?
Quiero que escribamos juntas:
que ya no somos de nadie;
palabras que sean risas,
risas que el tiempo no apague,
tiempo contado por lunas,
lunas de noches carnales.

Cántame y silba en el viento,
deja que pueda escucharte,
que me guíe tu alegría,
encontrarte es encontrarme.

Hada, no me abandones,
sigue alumbrando mis sueños.
Te sacaré del cajón,
olvidaré mis tormentos.
Vuela libre junto a mí.
Vuelve a esculpir mi cuaderno.