jueves, 17 de febrero de 2022

Violencia Obstétrica

Yo era de las que creía que la violencia obstétrica era una exageración. Que no había que llamarla así...Hasta que la sufrí en mis carnes. Paso a relatar mi parto. Y saquen sus propias conclusiones. Mi hija nació el 04/02/2021 en el Hospital Clínico de Zaragoza. Mi fecha probable de parto era el 30/01/2021. Unas semanas antes, contacté con el hospital para intentar hablar de mi plan de parto. Era el documento descargado del sitio del Ministerio de Sanidad, es decir, tampoco quería pedir nada a lo que no tuviera derecho ni ninguna exigencia rara. Mi intención era, si me veía con fuerzas, aguantar sin epidural, puesto que me daba miedo que me ocurriera como a mi hermana, que se le pararon las contracciones con la anestesia y eso supuso que se le alargara el parto muchas horas. Me recibió una matrona que lo revisó y me dijo a varias cosas que no iban a poder ser porque sus protocolos eran diferentes a lo que ponía en mi plan: - Me dijeron que me iban a coger una vía sí o sí. - Me avisaron de que no podría beber agua ni líquidos desde el momento que me bajaran a paritorios. - Respecto a moverme, me avisó de que estaría monitorizada y que sería complicado una vez en el paritorio. - Pregunté si había algún tipo de analgesia intermedia, que no fuera epidural y me dijo que no. O epidural o a pelo. - Respecto a la episiotomía me dijo que intentarían evitarla, pero no lo podía asegurar. - Lo mismo respecto a la sonda. - Sí me dijo que respetarían el piel con piel, y el corte tardío del cordón umbilical. - Respecto a que los profesionales que me iban a atender se presentaran y tal me dijo que solían hacerlo, pero que a veces con las prisas se les pasaba. Yo acepté sin poner pegas lo que me dijo, porque yo siempre asumí que eso era lo que quería en la medida en que se pudiera. Entendiendo en todo momento que los hospitales tienen protocolos y funcionamientos cerrados que no siempre se adaptan a nuestras expectativas. Me pidió que participara en un estudio que estaban realizando sobre embarazo y COVID y me devolvió mi plan de parto, en vez de guardarlo y tramitarlo. A posteriori, he llegado a pensar que me recibió y me atendió como vía para conseguir participantes en su estudio. Ya que lo de mi plan de parto cayó en saco roto. El día 3/02/2021 pasé ya la madrugada un poco molesta. A lo largo del día las contracciones fueron subiendo de frecuencia e intensidad. Hacia las 18:00 eché el tapón mucoso. Me bañé y aguanté en casa hasta las 2 de la mañana del 04/02/2021. Mientras estuve en casa tengo recuerdos bonitos. Con mi pareja ayudándome a aguantar, con música, con mi madre cuidándome. A las 2 y pico llegamos al hospital. Según nos mandaron hacia obstetricia mi pareja recordó a la persona que nos acompañaba que teníamos un plan de parto; a lo que ella respondió: "Para lo que os va a servir..." Llegamos a obstetricia y según abren la puerta para pasar a monitores la persona que abre le dice a mi pareja de muy malas formas: "Tú fuera", sin más explicación. Mi pareja le pregunta por qué y ella le dice: "No puedes pasar" y le cierra la puerta en las narices. Me dejan en una sala desnuda de cintura para abajo, con la ventana abierta de par en par. No sé cuánto tiempo. (estábamos en plena ola COVID) En casa las contracciones ya eran muy fuertes y muy seguidas. Pero entre el camino al hospital y ese recibimiento, se me paran un poco. Por fin viene una matrona, me hace un tacto, y me pasan a monitores. Me dicen que estoy dilatada de 3 cm. En monitores me traen una bebida hiper azucarada dicen que para que se mueva el bebé. Me dejan con el vaso en la mano todo el tiempo que estoy en monitores, y con una sensación de náusea para todo el resto del proceso. En esos primeros monitores (sola sin mi pareja) me dicen que la nena aguanta bien las contracciones y que me van a pasar a planta. En la planta, ya con mi pareja, él intenta que cojan el plan de parto, pero no recuerdo si consigue que alguien le haga caso. Con la tranquilidad, estando los dos solos, las contracciones vuelven a acelerarse y hacia las 5 rompo aguas en la habitación. Llamamos al timbre de enfermería, les decimos por el interfono que he roto aguas y preguntan: "¿se ha mojado mucho?" A lo que yo digo: "hombre, sí, un poco, he roto aguas" Al poco entra la enfermera y lo primero que exclama es: "A ver cómo limpio esto!". Mientras yo, dolorida, pienso: "estoy en una planta de ginecología y he roto aguas, disculpe usted, me podría decir si me bajan a paritorios o qué pasa?? Me importa una carajo cómo lo vayas a limpiar" Por fin me bajan a paritorios y de nuevo dejan fuera a mi pareja, "sólo mientras me cogen la vía". Entran dos personas, un hombre y una mujer. No sé sus nombres ni su cargo. Me hace un tacto la señora, me dice que estoy de 7 cm y que si quiero epidural. Le contesto que no sé, que no estoy segura, que si lo que falta duele o dura mucho. Me dice que doler, duele. Le digo que si puedo esperar a que entre mi pareja para decidirlo y me contesta: "la que vas a parir eres tú" (yo en ese momento no sabía que hacer, por el miedo que me daba a que se me paralizara el parto y porque me había estado preparando semanas antes para intentar tener un parto natural, y había hablado mucho con mi pareja sobre qué sería mejor y cómo lo haría, aunque en ese momento tenía bastante dolor) Primero intenta cogerme una vía la mujer en la muñeca izquierda. No lo consigue, lo intenta con el brazo, tampoco lo consigue; entra en escena el hombre (a posteriori supe que era el matrón), intenta cogerme vía en la muñeca derecha, y nada; y consigue por fin cogerme la vía en la flexura del brazo derecho. Los goteros siguen colocados a mi izquierda. Me han puesto correas por todos lados. Pregunto si me puedo mover y me contesta que sí. Pero intento moverme y entre las correas y los cables del gotero que me pasan por el cuello es imposible. Por fin entra mi pareja. Le digo que no sé qué hacer respecto a la epidural. Me hacen un nuevo tacto y me dicen que ya no puedo, que estoy dilatada completa. La señora que era algo más amable desaparece. Y ya se queda de responsable el matrón. Me pasan a la sala de partos porque vamos a empezar el expulsivo. Allí hay también una chica joven (entiendo que la residente de ginecología) y en algún momento aparece también otra enfermera que no sé de dónde ha salido. Durante el expulsivo el trato del matrón hacia mi, que es el único que me habla, es siempre con un tono de militar. Sólo órdenes en tono súper abrupto. En un determinado momento me intentan meter algo. Le pregunto que qué hacen, y me dicen que me van a sondar. Cuando todo mi cuerpo está intentando expulsar, y la cabeza ya está encajada, intenta, sin anestesia meterme un tubo por la uretra. Me hace muchísimo daño y yo además había leído que está desaconsejado. Le grito que no. Que ni se le ocurra. Me contesta que necesitan ese espacio para la cabeza de la niña y que si no, me tienen que hacer episiotomía. Le digo que haga lo que quiera pero que no me sonde. Así que me cortan. Me empieza a decir que "no le sirve que empuje en la garganta", "que tengo que empujar abajo" "que no respire a mitad" Le digo que si no me ahogo y que me voy a romper. Me ordena que empuje y lo hago. Y me rompo (me rasgué hacia clítoris pese a la episiotomía). Son las 6:30 de la mañana. La niña sale y le cortan rápidamente el cordón (sin preguntar y sin respetar nada del corte tardío) y se la llevan. Ni un minuto de piel con piel. Nadie me explica nada. No sé si ha habido sufrimiento fetal, si hay algún problema, o si es solo "protocolo". Mi pareja se va con la niña y yo me quedo expulsando la placenta sin el matrón y con la chica joven residente. Al rato me traen a la niña y me dicen que me la dejan "sólo10 minutos y luego nos la tendremos que llevar otra vez a observación". Pregunto si está bien, y me dicen que sí, pero que le quieren mirar bien la respiración. Ese momento que debería de haber sido precioso, me lo arruinaron su trato y su praxis. Me pusieron a la nena en el abdomen y trepó hacia mi pecho izquierdo. Yo trataba de sujetarla pero tenía a una enfermera gritándome que no doblara el brazo derecho porque como tenía ahí la vía, si lo doblaba no me pasaba la medicación (no sé qué medicación, ya que no me habían puesto epidural, imagino que oxitocina...pero a saber) El caso es que todo el rato gritaba: "que no dobles el brazo" "Que lo estires". Mientras tanto, matrón y residente me intentaban zurcir la episiotomía. Así que tenía al matrón gritándome que no me moviera. "Estáte quieta" "No te muevas" Me estás cosiendo la vagina sin una triste anestesia local...tengo a una bebé recién nacida en mi pecho y sólo me dejáis sujetarla con mi mano izquierda. Igual es normal que me mueva. Me arruinaron el momento que debería haber sido mágico, con un trato deplorable. Mi peor recuerdo no es el parto en sí, es el trato recibido y el dolor de cuando me cosieron. Para lo demás iba mentalizada, para eso, no. Además me hicieron una sutura muy mal hecha. Estuve un mes sin poderme sentar casi. Al final, mi madre, que es médico, me tuvo que soltar uno de los puntos porque me tiraba muchísimo y no había forma de que cerrara. Cerraron por segunda intención. Por suerte, la parte del clítoris no se atrevieron a coserla y por fin llamaron a la ginecóloga adjunta. Y vi la luz. Fue tan bestia el contraste que aún me da más rabia lo que tuve que pasar con ese individuo. La ginecóloga se presentó, me tranquilizó, me habló con cariño y suavidad. Me explicó todo. Y cuando me iba a meter la aguja, por fin le dijo la residente: "no lleva anestesia". A lo que la médico contestó: "ah, vaya. Ese detalle me lo podríais haber comentado". Así que me volvió a tranquilizar, echó spray local anestésico, me dijo que no era la panacea pero que algo me aliviaría. Y de verdad, que además de mucho más rápido, me dolió la mitad que los otros y cicatrizó muchísimo mejor. A todo esto, a la nena no se la volvieron a llevar. Tampoco me explicaron por qué. Dijeron que al final no hacía falta (mucho mejor, claro). Cuando ya me sacaron del paritorio me dijo el matrón: "es que con epidural controlamos todo mejor" y no sé cómo pude contener un "vete a tomar por culo maldito HdP". Antes de subirme a planta, vino un vez más y me hizo un tacto dolorosísimo, con gasas y tal para ver si sangraba. Y nada más subir a la habitación, como estábamos en plena ola covid, me remataron diciendo que me iban a poner compañera de habitación. (son habitaciones pequeñísimas y además, aquello nos obligaba a seguir con la FFP2 todo el tiempo de ingreso). Así que he estado con pesadillas durante varios meses después. La cicatriz de la episiotomía todavía me molesta bastante, tanto en relaciones sexuales, como yendo en bici...etc. Y lo que sí han conseguido es que yo, si vuelvo a parir, les voy a hacer caso y a obedecer en todo lo que me digan. Por supuesto con epidural. Porque me llego a plantear que el trato recibido haya sido porque les haya molestado lo del plan de parto. No sé, no encuentro otra explicación. Y porque, si total al final, van a hacer todo a su manera, por lo menos que no me hagan tanto daño, ni físico, ni emocional. La otra opción que me planteo es parir en casa. Porque mi parto fue precioso, hasta que puse un pie en el hospital....y se convirtió en pesadilla. No sé si pudo haber algún problema que no me explicaron con la nena...y que les entrase la prisa...o no sé. Yo ingresé hacia las 2:30 a.m. y a las 6:30 la niña ya estaba fuera. La verdad que todavía hoy no lo entiendo. En cualquier caso, coserme sin anestesia, es algo que sigo sin comprender. Y pasarse el piel con piel, y el corte tardío del cordón por el forro, pues tampoco lo entiendo. Siento haberme enrollado mucho, y haber dado tantos detalles que igual eran superfluos. Pero es que lo recuerdo todo como si fuera ayer... me gustaría ser capaz de ir olvidándolo...pero no puedo.

El primer año de Su

He venido aquí a intentar vomitar en palabras algunas de las sensaciones de este último año y me he sorprendido al leer la última entrada... Ya no la recordaba. Recordaba haberlo escrito, pero no recordaba haberlo publicado... Y mirando la fecha de publicación, me resulta aún más curioso. Publiqué eso el 10 de mayo de 2020 (aunque lo escribiera dos años antes) y el día 15/05/2020 me quedé embarazada de mi hija Susana. Lo confirmé el 27/05/2020 con un test más que positivo. Fue algo fortuito, no buscado para nada...pero estamos en febrero de 2022 y la Pequeña Su ya tiene un año. Me da entre risa, escalofríos y vértigo pensarlo. Han pasado tantas cosas...